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El centro de Villahermosa se encuentra minada de puestos ambulantes que venden pirotecnia a plena luz del día a pesar de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) prohíbe este tipo de vendimias.
Desde la avenida José María Pino Suárez, hasta la avenida Francisco Javier Mina es donde se pueden observar los puntos de venta de estos petardos, o sea prácticamente uno en cada esquina, así se pudo apreciar en un recorrido realizado por Grupo Cantón en esta zona de la capital tabasqueña.
“La gente ya se acostumbró a que viene a comprar sus cuetes aquí, no se siente miedo porque no ha pasado nada nunca”, dijo Mariela una de las vendedoras de ropa que se encuentran sobre la calle Bastar Zozaya.
Palomas, cañones, cohetes, carrilleras y chispitas son tan solo algunos de los juegos pirotécnicos que se comercializan en estos puntos de venta no autorizados por las autoridades correspondientes, a pesar de que estos estén a menos de 100 metros de otros puestos como taquerías y de comida callejera, los cuales utilizan fuego.
BURLAN OPERATIVOS
Hay que hacer mención que los comerciantes de petardos han aprendido la manera de sobrepasar la ley, puesto que al enterarse de los recorridos que han realizado las autoridades de la Unidad de Protección Civil Municipal estos rápidamente guardan su pirotecnia y se retiran del lugar donde se ofrecían.
En la zona se puede apreciar como familias enteras compras sus cuetes favoritos mientras hombres pasan con cigarrillos en la mano, mientras que los elementos policiales se hacen de la vista gorda de esta práctica que pone en peligro a los visitantes de la zona.
