La exsecretaría de Educación Pública, Delfina Gómez Álvarez se declara lista para buscar, por segunda vez, la gubernatura del poderoso y estratégico Estado de México en este 2023.
En agosto del año pasado, el CEN de Morena designó a Gómez Álvarez, como coordinadora de los Comités de la Cuarta Transformación en el Estado de México, luego de que obtuviera la mayor preferencia en las tres encuestas realizadas en la entidad mexiquense.
En aquella primera ocasión, 2016, fue el propio AML0, quien anunció que Delfina sería candidata de Morena al gobierno del Estado de México. No lo logró.
El triunfador fue Alfredo del Mazo Maza, actual gobernador, quien obtuvo 33.56% de los sufragios. Delfina quedó en 2° sitio.
Ahora, con un Morena más fuerte, y con las principales “corcholatas” apoyándola arrancará la campaña formal, como favorita.
Delfina Gómez Álvarez, nació el 15 de noviembre de 1962, en el Barrio de San Pedro, Texcoco, Estado de México.
Hija del señor José Guadalupe Gómez Pérez, de oficio albañil, y de la señora Catarina Álvarez Maldonado, dedicada a las labores del hogar, pero que, en busca de ayudar a su familia, vendía cosas para completar.
Es soltera, sin hijos. Tiene una hermana, y, un hermano.
Sus primeros estudios los realizó en la Escuela Primaria C.E. Nezahualcóyotl, (Turno Vespertino). (1968-1974). Los de Secundaria, en la Escuela Oficial número 130 Nezahualcóyotl. (1974-1977). Posteriormente estudió en la Escuela Normal número 21, en Texcoco. (1977-1982). Todo en el Estado de México.
Es Licenciada en Educación Básica egresada de la UPN (1983-1986); esos estudios los costeó cuidando a los tres hijos de una familia de clase media. Cursó una Maestría en Pedagogía, con Especialidad en Planeación Educativa, en el Centro de Estudios Superiores en Educación (1991-1994).
Entre 1998 y 2001, realizó otra Maestría, esta vez, en Educación, con Especialidad en Administración de Instituciones Educativas, por el ITESM, Campus Toluca. La primera escuela en la que dio clases fue en la Primaria “Doctor Gustavo Baz” en Chiconcuac, Estado de México, (1982 a 1987).
Ocupó diversas posiciones y encargos, tanto en el sector educativo, de la entidad que pretende gobernar, así como algunas asignaciones sindicales.
Mantuvo distancia de la actividad política, incluso, su proyecto de vida era jubilarse como maestra y hacer trabajo social en algunas zonas de México. Empero, un desayuno en la primaria Nezahualcóyotl, cambió su destino:
La directora invitó a un convivio al entonces presidente municipal, Higinio Martínez Miranda (2003-2006). Él había sido nombrado padrino de una generación que se graduaba.
Delfina contó a Higinio, el caso de Juan Carlos Flores, un niño que requería una operación urgente. Su familia no contaba con los 100,000 pesos que costaba la cirugía.
Convencido, el edil, hizo un cheque a nombre de la familia del estudiante. Le gusta el estilo de Delfina y se convirtió en su padrino político.
Fue quien la impulsó a que se convirtiera en candidata de Movimiento Ciudadano y del PT, para la alcaldía en 2012. En aquella elección ganó al PRI por 10,000 votos.
Una década después, Gómez e Higinio hicieron mancuerna. La maestra heredó la alcaldía a su padrino político, mientras que éste la impulsó para que se convirtiera en diputada federal. Volvió a derrotar al PRI.
Así ingresó al Grupo Texcoco. Pasado el tiempo, Higinio y otras figuras se sumaron a Morena. Entre ellos, Horacio Duarte, presidente municipal de Texcoco (2000-2003) y exsecretario del ayuntamiento en el mandato de Delfina.
En el 2017, pierde la gubernatura, pero con el triunfo de AMLO, en 2018, logró la Senaduría, aunque pidió licencia para ser Delegada Federal de los programas de Bienestar en el Estado de México.
En diciembre del 2020, Gómez Álvarez fue designada por el presidente López Obrador como secretaria de Educación Pública.
Le gusta el cine, leer, convivir con sus animales. Es fanática de los gatos y de los perros, principalmente de los de la calle. Escucha a Beethoven y los libros de superación personal.
Veremos, si logra la hazaña de ganarle al mítico Grupo Atlacomulco, hecho que no parece fácil.
