Por más de cuatro kilómetros de la avenida Ruiz Cortines hasta parar en Constitución, en el centro de la ciudad, una camioneta pick up circuló con una carga de tubos, fierros diversos y mangueras, lo preocupó a los conductores, pues las piezas amenazaban con caer y causar un accidente de fatales consecuencias, sin que en su trayecto ninguna autoridad de tránsito apareciera.
Los demás automovilistas o aceleraban o se quedaban muy atrás para evitar ser alcanzados por la tubería en caso de caer.
Y es que este es sólo un ejemplo del sinnúmero de vehículos con cargas ligeras o pesadas que cruzan por las arterias de Villahermosa y hasta por carreteras, con cargas que superan sus capacidades.
Materiales de construcción, muebles, frutas, tubería y madera, entre otros, son ejemplos de las cargas que son trasladadas a diario en cantidades excesivas, convirtiéndose en un peligro para los demás conductores.
En un recorrido realizado por Grupo Cantón, se identificó que prolifera en el crucero de la colonia Carrizal la circulación de vehículos tanto domésticos como de carga que transportan todo tipo de material.
LO QUE VIOLAN
De acuerdo al Reglamento de Tránsito y Vialidad del Estado, está prohibido rebasar las dimensiones de cualquier vehículo en un 25 por ciento de las medidas originales de las unidades, y en caso de excederlo en lo largo, es necesario colocar avisos de peligro.
Vendedores del crucero de Ruiz Cortines y Periférico, como Jorge, señalan que es común que circulen vehículos en esas condiciones, habiendo oficiales de la PEC.