- Desde Segob, Pemex, SAT, Fonatur e Insabi van por candidaturas
- Con poder y presupuesto funcionarios federales ¿llevarán ventaja?
Faltan menos de 21 meses. Y si algo hará distinta la próxima sucesión gubernamental de Tabasco es la cantidad de políticos chocos de peso pesado, peso wélter y peso ligero —dependiendo, si su cargo es federal o estatal—, que corren tras nuevas posiciones electorales rumbo al 2024. Muchos de ellos están agazapados, ocultos entre matorrales, cual lobeznos, esperando el momento para abalanzarse sobre las candidaturas, especialmente para sustituir al Capitán Carlos Manuel Merino Campos en la Quinta Grijalva.
Sin el control del lobo mayor, lo que se avecinaría sería una cacería descarnada entre ellos, acorralando a los huesos de más «carnita», no en vano han formado manadas, grupos, alianzas, para crear un polígono — como los lobos cuando atacan— e ir cerrando los espacios hasta dejar pocas posibilidades de que se les escape la gubernatura, entre otras posibilidades.
Igual de inédito es que en esta renovación gubernamental pesará la figura presidencial tabasqueña, que muy seguramente controlará los procesos electorales locales, evitando que esos lobeznos que él mismo se llevó al Gobierno Federal salten desde los matorrales, donde sigilosos no dudarán en hacer acopio de todos los recursos que tengan a la mano buscando ser o imponer gobernador, senador o alcalde de Centro.
Conociendo el control político que ejerce Andrés Manuel López Obrador, sin su voluntad no se moverá ninguna hoja en Tabasco. Él es el jefe de todos ellos y único mandón en el estado, por lo que las encuestas serán —como ya lo fueron en Edomex y Coahuila– los métodos de control centralizado e irrebatible que se usará para encartar y desencartar a todos los que andan buscando desde ya un espacio.
Estos son los gallos colocados en el Gobierno Federal y convertidos en políticos muy poderosos, con estructuras a la mano y posibilidades de mover recursos públicos:
- El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ha mostrado que gusta de tener control total, por lo que estará muy atento de lo que suceda en el estado y él representará el auténtico equilibrio Nada se moverá sin su decisión.
- Adán Augusto López Hernández, tiene un peso y poder muy especial, además de secretario de Gobernación, es aspirante presidencial y hombre muy cercano a la gubernatura actual, él mismo es aún gobernador con licencia. Controla a políticos cercanos a él, de los que pretende colocar al que pueda como sucesor de Merino.
- Javier May Rodríguez, ex secretario de Bienestar donde cultivó una estructura que se mueve en los municipios, mientras que como responsable del Tren Maya no desaprovecha invitaciones en el estado buscando ser gobernador. Trae muchos recursos económicos.
- Octavio Romero Oropeza, director de Pemex, también aspira a la gubernatura y no desaprovecha oportunidad de entrega de apoyos sociales en Tabasco. Aunque ORO tiene una alianza con May al que apoyará en caso de no resultar candidato. Juntos buscan darle batalla al grupo de notarios que hoy gobiernan la entidad.
- Rosalinda López Hernández, administradora General de Auditoría Fiscal Federal del SAT, no ha hecho presencia en el estado, pero públicamente no se ha descartado como candidata a gobernadora.
- Juan Ferrer Aguilar, director general del INSABI, aunque sin interés electoral claro, se le observa alineado al secretario de Gobernación, por lo que no se descarta que puede operar a favor de los aspirantes que impulse el titular de Segob.
- Oscar Cantón Zetina, actual diputado federal, ha declarado abiertamente que busca una vez más la candidatura al gobierno estatal (ya le toca, dicen). Es uno de los políticos con mayor experiencia y trayectoria. Despliega su propia estrategia confiando en la encuesta que realizará Morena. Es cercano al Presidente.
- Mario Llergo Latournerie, actual diputado federal y representante de Morena ante el INE, lo que le ha dado relativa proyección nacional, fue secretario de Bienestar de Adán Augusto y ahora se promueve por la alcaldía de Centro.
- Mónica Fernández Balboa, senadora de la República, está navegando de bajo perfil, pero está interesada en participar si se decide que la próxima candidata a la gubernatura de Tabasco sea mujer.
- Manuel Rodríguez Javier, diputado federal, camina con intenciones de continuar vigente en algún puesto de elección popular. Es Presidente de la Comisión de Energía y secretario de la Comisión de Radio y Televisión.
- Luis Roberto Salinas Falcón, director del Programa Precios de Garantía de Segalmex, hombre promovido por el secretario de Gobernación y que se encuentra interesado en algún escaño
- Ovidio Salvador Peralta Suárez, suplente de Javier May en el Senado de la República, perfilado por el propio May para ser alcalde de Comalcalco o incluso incluirse en el equipo del Tren Maya en caso de que triunfe en la encuesta.
- Jesús Alí de la Torre, actual funcionario del Infonavit que muestra interés en inscribirse para algún escaño en el Congreso de la Unión una vez que se abran los registros.
Solo AMLO podrá frenarlos, ordenarlos y aunque ellos dispongan de recursos federales, según los principios de la 4T, no deberían disponer de ellos a conveniencia suya y menos presionar al Presidente, sino que tendrán que disciplinarse a él. Para ser claros: ellos podrán disponer de recursos federales, pero no podrán disponer de ellos, pues volviendo al estilo de ejercer el poder de Andrés Manuel, éste hará valer en plenitud sus derechos electorales en los cargos más importantes y no negociará posiciones con nadie.
«No hay más
alianzas que las
que trazan los
intereses»
(ANTONIO CÁNOVAS DEL CASTILLO)
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