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TABASCO. En Tabasco por lo menos 672 mil personas de más de 943 mil que integra la Población Económicamente Activa (PEA) y que están ocupadas no recibirán aguinaldo ni ninguna de las prestaciones que se entregan al finalizar el año, de acuerdo con datos del INEGI.
Esto es consecuencia de elevadas tasas de desempleo y de informalidad, que se ubican en 6.3 por ciento y 62.4. por ciento de manera respectiva.
Los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), con cifras al tercer trimestre 2022, revelan que en la entidad hay 64 mil personas sin trabajo, que han tratado de contratarse sin poder conseguirlo.
Entre tanto, en el sector informal el INEGI muestra qué hay 588 mil tabasqueños que no tienen una dependencia laboral reconocida por su fuente de trabajo.
Y hay poco más de 20 mil que se catalogan como trabajadores por cuenta propia, de tal manera que dependen de los ingresos que ellos generan.
SIN ACCESO A PRESTACIONES
Todas estas personas por su condición no tienen ingresos, otros sí, pero no son fijos o están supeditados a la naturaleza de la actividad que realizan; y como consecuencia tampoco tienen acceso a las prestaciones que las leyes del país prevén.
Las estadísticas demuestran también que es mayor el número de trabajadores que se declara ocupada sin derecho a prestaciones por su condición, que la que sí lo tiene.
Con base en la ENOE, en el tercer trimestre del año la población ocupada en Tabasco, aumentó en 122 mil personas, lo cual posible gracias al incremento de la oferta laboral en el sector terciario, que integran los sector comercio y servicios.
El INEGI encontró, además, que hubo un aumento en el número de empleos de tiempo completo y un incremento en en la ocupación en el ámbito no agropecuario, principalmente en los micro negocios.
A la par del aumento de la ocupación, también creció la PEA, misma que hoy está conformada por un millón de personas.
“Me harté de mis jefes”
Este será el primer año desde que trabaja en que Edgar Torres no recibirá aguinaldo ni ninguna otra prestación, pues cansado de tener empleos mal remunerados y con horarios extenuantes, decidió convertirse en su propio jefe.
“La verdad yo he trabajado siempre y he buscando tener mucha disposición en el trabajo, pero no he sido remunerado más que con el sueldo base y pues me harté de los jefes que te exigen y no valoran tu esfuerzo”, afirma.
Como empleado de nómina, menciona que en distintas ocasiones tuvo problemas debido a que la empresa no le daba de alta en el IMSS o dejaban de pagar sus cuotas y cuando requería el servicio se lo negaban.
Al igual que para muchos trabajadores, el único aliciente que podía recibir era el aguinaldo en el mes de diciembre; aunque solo se trataba de una quincena al final era un ingreso extra.
ES SU PROPIO JEFE
Edgar se dedica ahora a brindar servicio de transporte privado por aplicación y bajo este esquema puede ahorrarse la comida y hasta el transporte; “ganas más si te esfuerzas”.
Para sortear los gastos de fin de año su familia elabora piñatas, además que tiene otras ventas caseras.
“La única desventaja de trabajar así es que no tienes seguro social, el facultativo es muy caro, aunque en mi último trabajo tampoco tuve y tenía que andar prestando dinero a mi jefe cuando necesitaba comprar medicamentos”, apuntó.